Tenés miedo…? La condición humana está fuertemente signada por el miedo. Arrojados a la existencia desde el parto, (...o antes) la experiencia de temor acontece en múltiples circunstancias. Miedo a la incertidumbre, al castigo, a la muerte, a la derrota, al abandono y tantos otros. Miedo a la vulnerabilidad, a la intemperie, al desamparo, el dolor y sigue la lista. Es así también, como tantos y tantos nombres pretenden disimular el miedo: Precaución, inseguridad, temor, susto, cautela. ¿Podrías agregar otros eufemismos a la lista? ¡Seguro! Hoy se piensa que detrás de todo nuestro hacer, está el lidiar con el miedo. Suena fuerte ¿No? Las distintas corrientes psicológicas abordaron extensamente esta temática. El temor a la castración y al incesto en el psicoanálisis, la actitud básica fóbica en Gestalt, el aprendizaje condicionado y la evitación en los modelos cognitivos, y tantos otros. Los mecanismos de defensa son herramientas de respuesta frente al miedo. La filosof...
Afrontar o evitar, ¿Qué elegís? En la vida diaria , abordamos situaciones que nos representan como “cuellos de botella”, dilemas mayores y menores… Se visten de oportunidades, desafíos, decisiones, elecciones y también amenazas. Nótese que digo abordamos y no enfrentamos… Enfrentar, indica ya un posicionamiento propio ante la situación, que a menudo puede empeorar las cosas. Abordar cuestiones, de manera flexible, inteligente y creativa, desarrolla nuestra pericia, nuestros recursos y genera aprendizaje. Pocas veces las amenazas, son tales. Muchas veces, percibimos amenazas, donde solo hay desafíos… Esta buena distinción es fundamental y será parte de la solución, o modo de agravar el problema. Otro discernimiento clave, es entre la situación real y las múltiples y catastróficas imaginaciones que nuestras malas evaluaciones nos despiertan… Imaginamos miles de posibilidades desfavorables… que nunca ocurren… ¿No? Si finalmente logramos ent...